Inicio MEDIO AMBIENTE Esto es el infierno

Esto es el infierno


 

Nunca como ahora el intenso calor había provocado tanto daño, lo mismo en las ciudades que en el campo, porque las temperaturas han llegado a promediar los 40 grados y la sensación térmica en Coatzacoalcos ha sido hasta de 45 a 50 grados. Esto ha provocado una serie de desajustes debido a que ha sido mayor a la temperatura normal de un cuerpo en reposo que está entre los 36 y 37 grados centígrados.
La ola de calor se ha extendido en tiempo y en espacio, muestra de que el cambio climático sí es una realidad y está causando estragos entre la población, que si uno se descuida puede sentir desde un ligero mareo hasta llegar a perder la visión por unos segundos y hasta minutos.
Las altas temperaturas provocan que los vasos sanguíneos se dilaten para incrementar el flujo sanguíneo, aumenta la frecuencia respiratoria y la sudoración, sobre todo si los días y las noches se mantienen calientes y húmedas como ha sucedido en estos días.
Además de los efectos corporales provocados por las altas temperaturas, están los que dañan la salud mental de la gente, que por la ola de calor se torna iracunda y en ocasiones se vuelve terriblemente agresiva, apareciendo incluso cuadros con trastornos obsesivos compulsivos, paranoicos y de mucha irritabilidad. En otros casos el exceso de calor puede causar además de fatiga y decaimiento, un cambio anímico y hasta insomnio lo que provoca mayor cansancio al día siguiente y fuertes dolores de cabeza.
Es común observar durante esta temporada un incremento en incidentes de violencia, la gente se vuelve más conflictiva y por cualquier cosa se enoja, sobre todo en el entorno familiar. También los hechos delictivos como asesinatos, asaltos, violaciones y todo tipo de agresiones aumentan de manera alarmante.

ASÍ DE IRRITABLES
No sé si le ha pasado, pero en estos días en que las temperaturas han estado tan altas, las personas en la calle se alteran muy fácilmente, lo mismo si uno cruza la avenida despacio que si se baja del auto o le niega la limosna al indigente que pide en los cruceros.
Lo mismo en los restaurantes, los meseros pagan los platos rotos al tener que soportar que los comensales les levanten la voz o les exijan de manera altanera y muchas veces ofensiva una atención rápida.
Una de estas noches me tocó presenciar como unos jóvenes golpeaban en el malecón de Coatza a un sujeto aparentemente ebrio y ya tirado en el pavimento lo patearon sin piedad alguna. También durante el día vi cómo le mentaban la madre a un adulto mayor sólo porque se estaba bajando lentamente de su automóvil. Así de irritables andamos.
Lo cierto es que los efectos de la ola de calor son impredecibles y peligrosos, por lo que hay que salir a la calle cuando los rayos del sol han disminuido y la brisa comienza a refrescar el ambiente, porque todos somos vulnerables y susceptibles de irritarnos por este calor infernal.
Por fortuna, ya comenzaron las lluvias y si bien nos va podríamos tener unos días menos calurosos, antes de que llegue la canícula, la temporada más caliente del año, que comienza cada mes de julio y termina en agosto.
Mientras tanto hay que beber mucha agua, reducir la actividad física y no salir a la calle si no es necesario, sobre todo cuando los rayos del sol caen a plomo sobre nuestra humanidad.

Artículo anteriorPreparen, apunten
Artículo siguienteLos Marx—sistas…

1 COMENTARIO

  1. Qué barbaridad, Gabo!!! Creo que el calor si no eres propietario de un súper aire acondicionado puede de verdad volverte loco!! No se las medidas que se deben de tomar, por lo pronto no salir a horas de máximo calor y tomar mucha agua. En este momento ya no, pero en la Cd. de México nosotros padecimos muchísimo calor también, poco usual en la capital.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario
Por favor ingrese su nombre aquí